Corea, o cuando el cine trasciende las barreras culturales

 

Se puede decir que Hollywood suele vender sueños idealistas. Corea conecta con los sueños que se construyen desde la realidad. El cine coreano es uno que no teme abordar cualquier temática que incurra en los sentimientos del ser humano y la sociedad que integra; al contrario, se siente cómodo en ese espectro y suele ser valiente al mostrar según qué cosas en pantalla. Como espectadores acostumbrados mayormente a producciones cortadas por el mismo patrón, se agradece encarecidamente.

El cine coreano alcanza la simpatía global porque, a pesar de seguir un estilo diferente, las situaciones que atraviesan sus personajes y las emociones que experimentan, son capaces de conectar tanto con un coreano, como con un ciudadano de otra región. La cultura varía dependiendo de los lugares geográficos, el contexto y las tradiciones establecidas; las emociones y los sentimientos, no. Al final del día, todas las personas tienen la facultad de sentir del mismo modo. Es por ello que, el cine coreano habla en un lenguaje que atraviesa cualquier barrera lingüística o cultural.

Para entrar a detallar más en profundidad los entresijos de las producciones coreanas y su impacto mundial, sírvete un café, siéntate y visita el siguiente enlace. Vamos a hablar del cine coreano: https://youtu.be/e6GJJZ7Dz2Y